Hoy entrevistó a la escritora Carmen Sereno, autora del libro "Maldito síndrome de Estocolmo
Biografía
Carmen Sereno (Barcelona, 1982) es periodista y ha trabajado en diversos medios de comunicación y grandes corporaciones. Un día se dio cuenta de que había demasiadas historias por ahí que debían ser contadas y lo dejó todo para cumplir su gran sueño de ser escritora. Viajar es lo segundo que más le gusta después de escribir. Fotografiarlo todo, lo tercero. Habla varios idiomas y le apasionan los países nórdicos, sobre todo Suecia. De hecho, lleva la palabra «Estocolmo» tatuada en el brazo, aunque, cuando le preguntan, suele decir que es simbólico para hacerse la interesante. Está casada y tiene un hijo que, curiosamente, fue concebido en esa ciudad.
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Descubre la entrevista literaria a Carmen Sereno
1. ¿Podrías decirnos qué significa el término literatura para ti?
La literatura es mi trabajo y mi gran pasión. Pero además es una vía de escape, una manera de hacerle trampas al destino y vivir otras vidas, como autora y como lectora. Es la expresión de los sueños, los miedos y los anhelos más profundos.
2. ¿Cómo se describe un escritor?
Como un ser obsesivo, perfeccionista e inseguro, un poquito egocéntrico, creativo, soñador, observador y muy imaginativo.
3. ¿Para qué público es más fácil escribir?
No creo que haya públicos más fáciles que otros. Incluso dentro de un mismo género, cada lector interpreta un libro a su manera. Lo que a uno le entusiasma a otro no y, por eso, es complicado “acertar”. No hay un truco para gustar todo el mundo; sencillamente, no se puede.
4. ¿El libro digital es el futuro o seguirá el libro de papel?
Puede que dentro de muchos años sí, pero creo que todavía queda coexistencia de ambos formatos para rato. La penetración del libro digital en la mayoría de los países es progresiva, pero lenta.
5. ¿Cómo se escribe un libro?
Con muchísimo esfuerzo, disciplina y trabajo diario, evitando a toda costa las distracciones, haciendo autocrítica, siendo humilde, leyendo sin parar y dejando que la historia se enfríe antes de corregirla al menos dos o tres veces.
6. ¿Se tiene miedo a las críticas?
Por supuesto. Las críticas duelen, es una realidad. Pero hay que intentar aprender de las que constructivas e inmunizarse contra las destructivas porque siempre van a existir. Un libro nunca podrá gustar a todo el mundo, siempre habrá voces discordantes y críticas más o menos despiadadas, eso forma parte del trabajo.
7. ¿Con qué sueña todo escritor?
Con llegar al máximo número de lectores y, si es posible, emocionarles.
8. ¿Estás a favor de que las novelas las adapten en películas o series?
Ni a favor ni en contra. Soy de las que suele preferir los libros a las películas porque hay ciertas historias que pierden mucho valor al adaptarlas. Me refiero a que hay detalles de la personalidad de los personajes o de la atmosfera muy difíciles de extrapolar a una pantalla. Me viene a la mente el caso de la adaptación de El guardián invisible, la primera parte de la trilogía del Baztán de Dolores Redondo. Personalmente, opino que toda la magia telúrica que destilaba la novela se perdió en la película, que se quedó en un buen thriller y nada más. En cambio, me sorprendió muchísimo la adaptación de El perfume, una novela que siempre he creído que sería imposible de llevar al celuloide porque es demasiado evocadora y sensorial. Creo que el resultado fue espectacular. Y luego hay algún caso aislado, como el de la serie Outlander, en los que prefiero la adaptación televisiva porque la química entre los protagonistas es insuperable (espero no ganarme muchos unfollows con esta afirmación).
9. ¿Qué libro recomiendas?
Me gustan mucho los clásicos, así que, entre mis recomendaciones no podrían faltar Orgullo y prejuicio, Cumbres borrascosas, Norte y sur o Lejos del mundanal ruido. Como novelas de cabecera, El jinete de bronce y De parte de la princesa muerta. Por otra parte,acabo de leer La trenza, de Laetitia Colombani, y me ha parecido una auténtica maravilla. Una historia dura pero llena de esperanza sobre tres mujeres con circunstancias muy distintas entre sí unidas por algo tan común como puede ser el cabello. Está escrita con un estilo narrativo sorprendente.
Maldito síndrome de Estocolmo (Chic)
10. ¿Qué autores admiras y te han inspirado?
Admiro a muchos autores y leo muchísimas novelas al cabo de los meses que me inspiran de una u otra forma. Como autores internacionales, me gustan Paul Auster, Haruki Murakami, Joël Dicker, Amélie Nothomb, Paullina Simons, Kenizé Mourad o David Foenkinos, entre otros. Y como nacionales, destacaría a Víctor del Árbol, Juan Gómez-Jurado, Alejandro Palomas, Rosa Montero o Fernando Aramburu. Pero, insisto en que mi lista es interminable.
11. ¿Es fácil darse a conocer?
Relativamente. Hoy en día, gracias a la autoedición, publicar un libro es más fácil que hace unos años. Pero que una editorial apueste por ti es más complicado.
Hay que tener en cuenta que las editoriales reciben muchísimos manuscritos y, por lo general, si eres un autor novel, es difícil que te tengan en cuenta. Difícil, pero no imposible.
Una buena forma de intentarlo es presentándose a alguno de los premios literarios que suelen convocar cada año en los que yo recomiendo participar.
Hay que ser realista; suelen estar muy reñidos porque hay mucha calidad y muchos participantes. Yo tuve la suerte de ganar el I Premio de Novela Romántica Chic con mi opera prima Maldito síndrome de Estocolmo, que resultó elegido entre muchos manuscritos y eso es algo que rara vez ocurre. Pero puede ocurrir, así que no se debe perder la esperanza.
Una vez has conseguido publicar, sea mediante una editorial o por tus propios medios, es muy importante trabajar a diario en redes sociales para hacerse un hueco y fidelizar a los lectores.
Un libro del que no se habla es un libro que no existe, por desgracia. Y me atrevo a decir que, salvo excepciones, un autor que no está en las redes e interactúa con sus lectores es un autor invisible.
12. Cuando firmaste tu primer contrato con una editorial ¿Qué te pasaba por la cabeza?
No me lo podía creer. Pensaba “Esta no soy yo, esto no me está pasando a mí, me lo he imaginado”. Estaba flotando, en una nube; por fin se había cumplido el sueño de mi vida.
13. ¿Recomendarías la autoedición para escritores noveles?
Les recomendaría que explotaran primero la vía de la editorial y, si después de intentarlo no lo consiguen, entonces que se decanten por la vía de la autoedición.
14. ¿Con qué personaje literario te sentarías a tomar una taza de café y por qué?
Con Fitzwilliam Darcy, de Orgullo y prejuicio. Porque, a mi juicio, encarna el arquetipo de héroe romántico que ha inspirado, de un modo u otro, a todos los que le han seguido.
15. Si pudieses encerrar a algún personaje en el manicomio, ¿elegirías a alguien?
Lo dudo mucho. Soy de las que disfrutan con las locuras, las contradicciones y los comportamientos retorcidos de ciertos personajes. Yo creo que, si están ahí, es porque la historia lo exige.
Azul Estocolmo (Chic)
16. Si pudieras ser el protagonista de un libro, ¿de qué libro te gustaría ser?
De muchos. Solo por citar algunos, de Orgullo y prejuicio, de El jinete de bronce, y de los míos, por supuesto.
17. Si pudieras darle un consejo a un escritor que empieza, ¿cuál sería?
Que escriba lo que a él o a ella le gustaría leer, sin miedo. Que pase de modas, imposiciones canónicas y corrección política. Que se arriesgue y que, si se lo pide el cuerpo, que transgreda. Que su voz es única, personal e intransferible y que recuerde que la literatura está para hacernos sentir libres. Que las negativas y las críticas llegarán, pero que no se desanime y que siga confiando en su trabajo.
18. Para los que no te conocen, háblanos de tu último libro.
La Serie Estocolmo es mi primer trabajo literario. Se trata de una bilogía romántica que se compone de Maldito síndrome de Estocolmo y Azul Estocolmo. Con el primer título, gané el I Premio de Novela Romántica Chic de la editorial Principal de los Libros. La historia gira en torno a Ana Luna, una joven milenial de Barcelona, que empieza a trabajar en una gran compañía farmacéutica llamada Laboratorios Grau en la que descubre los entresijos del sector en particular y de las grandes corporaciones en general.
Sus principios colisionan de pleno con las prácticas de la empresa, pero entonces conoce a Eric Grau, su jefe y el Director de Ventas y Finanzas, un hombre misterioso de origen sueco que pone patas arriba su existencia y sus propios valores.
Entrevista realizada con la colaboración de @vicentevelert
Bueno, pues aquí concluye la entrevista, muchas gracias
Carmen Sereno por colaborar con “Munduky”