Descubre la alegría de ser tú mismo con ¡Fuera disfraces!

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Ilustrado por Anna Baquero

El libro sobre expresión de género que nos anima a cuestionar las normas absurdas.

«¿Por qué me obligan a disfrazarme para ir al colegio?» Esto es lo que se pregunta Álex, el protagonista de ¡Fuera disfraces! la última novela infantil de la escritora y activista LGTBIQ+, Bel Olid, nos invita a replantearnos prejuicios, imposiciones sociales y mensajes equívocos a través de algo tan cotidiano como la ropa.

Frente al aumento de las agresiones a personas del colectivo LGTBIQ+, la escritora nos habla de expresión de género de una manera sencilla y alegre en un libro dirigido a lectores y lectoras a partir de 7 años e ilustrado a todo color por Anna Baquero.

Un libro para descubrir la alegría contagiosa de atreverse a desafiar las normas absurdas.

En casa, Álex puede ponerse su ropa favorita: tutú, traje de astronauta o zapatillas de purpurina. Pero cuando hay que ir al colegio, es siempre lo mismo: pantalones aburridos, camiseta aburrida, zapatillas sin purpurina... Parece ser que «los niños visten así» y «hay que seguir unas normas». «La ropa no es tan importante, Álex, tú sigues siendo tú te vistas como te vistas», le dicen en casa. Pero, si la ropa no es tan importante, ¿por qué no puede ponerse la que le dé la gana?

¿Y si no es el único que va disfrazado de «niño normal» a la escuela? ¿Y si compañeros y maestros también se disfrazan de «gente normal», pero en el fondo les gustaría vestirse de maneras mucho más originales?

Como el resto de niños y niñas, al principio, Álex seguía las normas aunque no las terminase de entender. Aún así, a veces pensaba «en cuál era la ropa de verdad de sus compañeros, y si se la ponían también nada más llegar a casa. Le daba un poco de vergüenza preguntar por si creían que era un chismoso o, peor aún, que era un rarito que hacía preguntas extrañas.»

Un día, Álex se lleva su tutú preferido a escondidas y se lo pone a la hora del patio. Sus amigos alucinan con aquella falda y todos se la quieren poner. Hasta que unos matones de sexto se lo cogen y lo rompen.

La vergüenza y el miedo a que piensen que somos diferentes nos hacen ponernos “el disfraz”, pero Álex nos recuerda que no somos nosotros los que hemos de cambiar para evitar que se rían de nosotros. «No entiendo por qué no puedo vestirme como quiera. ¿Y si resulta que vamos todos iguales no porque a la mayoría les guste, sino porque todo el mundo tiene miedo de la gente como aquellos tres salvajes? ¿A vosotros no os dan nunca ganas de quitaros el disfraz?»

Mediante la lectura de ¡Fuera disfraces!, pequeños y mayores aprenderán que la ropa no debería ser un problema y que nadie debería reírse de nadie por su aspecto.